Cuando el pasado 29 de agosto el balón comenzó a rodar sobre el césped del Benito Villamarín una ciudad entera volvía a soñar con su equipo. Atrás quedaban 22 años en el destierro de las categorías inferiores del fútbol español, Segunda B y Tercera, y 35 desde la última vez que el Granada estuvo en Primera, algo que hoy se antoja como un lejano pasado para la mayoría de la afición que ni siquiera había nacido ó quizá no tan lejano.
Mientras el esférico se deslizaba por la fina hierba de Heliópolis bajo el cálido sol de agosto en la ciudad de Sevilla, Granada volvía a sentirse importante en el mundo de fútbol, volvía a estar en los mapas de los aficionados a este deporte de toda España y del extranjero. Pero ¿por cuánto tiempo? El equipo había fichado bien, se había reforzado con varios jugadores que habían jugado el Mundial, con tipos con experiencia en Primera... Sin embargo, ¿sería suficiente para mantenerse en una categoría tan dura y después de tanto tiempo como es la Liga Adelante? Ahora tras 6 meses puede decirse que sí y que incluso el equipo tiene serias opciones de ascender a la Liga BBVA, algo que hace unos años con el club a punto de desaparecer parecía incluso una utopía. Hoy el milagro de este Granada, aparte de jugadores y afición, que parecía que nunca iban a llegar tiene nombre y apellidos Ginno Pozzo.
Ginno Pozzo es un empresario italiano afincado en Barcelona, hijo de Giampaolo Pozzo presidente y dueño del Udinese, que posee una pequeña parte del accionariado del Espanyol. Desde hace años toda la familia ha estado ligada al mundo del fútbol y de los negocios comenzando por un pequeño club de Italia, el Udinese, al que no sólo han consolidado en el Calcio si no que incluso bajo su mandato ha conseguido disputar varias ediciones de la Champions League. El desembarco de los Pozzo en Granada se fraguó hace dos años, en julio del año 2009, cuando el equipo militaba en el pozo de la Segunda B. En sólo dos temporadas fue capaz de ascender a Segunda, quedando campeón de la categoría, y ahora se encuentra en 4ª posición de la Liga Adelante algo que nadie esperaba cuando comenzó la temporada.
En ese "bendito" mes de julio del verano de 2009 para los granadinos Ginno Pozzo decidió invertir en el equipo de la ciudad adquiriendo el Granada C.F. acabando con la deuda de la entidad y convirtiéndola en una SAD. Su primera medida como propietario fue situar en la Presidencia a Quique Pina, su representante en España. El mismo Quique Pina experto en sueños y pelotazos, que consiguió llevar a un club de barrio de Murcia (Ciudad de Murcia) hasta la Segunda División para después venderle la plaza a otro empresario, por una buena cantidad de millones de euros, que llevó el equipo a Granada (casualidades de la vida), le cambió el nombre por Granada 74 y fracasó en el intento descendiendo ese mismo año. Ya con Pina como presidente el objetivo era lograr el ascenso a la Liga Adelante, para ello el equipo consiguió la cesión de varios jugadores del Udinese que no tendrían sitio en el conjunto italiano y podrían ayudar a conseguir la meta del otro club propiedad de la familia Pozzo a la vez que disfrutar de minutos. Así llegaban a la ciudad nazarí Ighalo, Nyom, Kitoko... que junto los ya presentes Tariq, Mainz, Amaya... lograron el ansiado ascenso.
Llegó el verano y Granada volvía a respirar fútbol de plata, al fin se había logrado salir del pozo y el equipo estaba en el buen camino. Pero la Segunda es una categoría muy traicionera y eso lo sabía bastante bien Quique Pina así que el siguiente paso consistía en hacer una plantilla competitiva y de calidad para lograr la permanencia sin sufrir. Para ello, Ginno Pozzo volvió a llamar a su padre y esta vez se trajo hasta 13 jugadores pertenecientes al club italiano: Amaya, Mainz, Mensah, Nyom, Siqueira, Abel Goméz, Carlos Calvo, Dani Benítez, Kitoko, Geijo, Muriel, Orellana y Tariq. Con estos fichajes más los que lograron subir se formó el plantel que debía competir en la Liga Adelante.
El equipo comenzó bastante mal la competición, con 3 derrotas consecutivas aunque poco a poco logró ir enlazando buenos resultados, entre ellos varias goleadas. Geijo comenzó a marcar goles, hasta liderar la tabla de realizadores, Dani Benítez desbordaba rivales por la banda izquierda y dejaba muestras de su exquisita calidad, Mikel Rico era un tapón en el centro del campo y Mainz lideraba con firmeza la defensa. Ahora el Granada es cuarto y la Primera está cada vez más cerca, va recortando puntos a Betis y Rayo aunque ya está en puestos de playoff y es el conjunto más goleador de la categoría. Toda Granada está encantada con su equipo y en la ciudad se vuelve a soñar con poder ver en en el Nuevo los Carmenes a las grandes estrellas de la mejor Liga del mundo. ¿Quién sabe? Ya lograron salir del pozo y volver a soñar, quizá ahora Pozzo los lleve a soñar aún mucho más alto. Por ahora tienen mucho que agradecerle.
Por Alejandro Salguero
Twitter: @salguerito88
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